cerca de finales de mayo de 1999 fui baleado por invasores del hogar en la casa de mis ahora ex-suegros. Vivían en una parte rica de Los Ángeles y mi esposa y yo habíamos llegado a casa de una cena tardía. Ella conducía, yo en el asiento del pasajero. Iba a coger algo de mi coche en la calle, así que caminé hacia la calle desde el coche aparcado en el garaje., Cuando lo hice, y mi esposa salió del coche y caminó hacia la puerta de la casa dentro del garaje, ambos vimos a dos hombres caminando por la calzada, uno frente al otro, el hombre en frente tenía un arma apuntando a mi cabeza. Mi instinto: girar y girar, correr hacia la casa entre los dos coches aparcados en el garaje. Su instinto: gritar y correr a la casa. Corrí todo el camino desde el medio de la entrada, a través de los coches y hasta la puerta, me di vuelta para subir las escaleras cuando escuché un fuerte estallido knew sabía que se había disparado un arma. Luego la conocí en las escaleras y corrimos a la cocina para llamar al 911., En el teléfono con el 911, la adrenalina se disparó, decidí que necesitaba defenderme si los intrusos iban a entrar en la casa. Colgué en el 911. Me ahorraré algunos detalles aquí, pero baste decir que los intrusos no entraron en la casa. Recordó 911, el operador luego me preguntó si me habían disparado, la ambulancia y la policía llegaron en 10-12 minutos, pasé 3 horas en el hospital y fue dado de alta.